Él, Aaron, el maestro fotógrafo. Ella, Rosie, su amante y más fiel discípula. Cada fin de semana tienen una cita donde se abrazan, se aman y sonríen juntos delante de una cámara mirándose a los ojos como cualquier pareja de enamorados. La única diferencia es que 6.500 kilómetros los separan.
Para cualquier otro ésto supondría un abismo, pero ellos combaten la distancia usando su talento y la magia de photoshop.
Aaron vive en Carolina del norte, mientras que Rosie pasa sus días en una pequeña aldea de Inglaterra. Se conocieron a través de Flick, y sintieron que eran almas gemelas que hablaban el mismo lenguaje usando las imágenes como palabras.
Primero fueron los emails, después las horas muertas en skype, y finalmente Aaron viajó hasta Inglaterra para conocer personalmente a Rosie.
Poco a poco fueron creando y guardando un sinfín de postales mágicas en las que el tiempo y el espacio parecen no ser un problema.
Sus portafolios individuales son toda una caricia para los ojos, y el dedicado a contar su historia en la distancia simplemente una obra de arte.
PS: Tras casi dos años de empezar el romance, Rosie viajó hasta EEUU y a día de hoy viven juntos, también en la "vida real". ( y continuan posteando fotos)
(visto en Kurioso´s web)
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